Primero, las cadenas de anclaje de eslabones sólidos se fabrican con un acero robusto. Desempeñan un papel muy importante: conectan el barco con el ancla, lo que mantiene la embarcación en su lugar. Cada uno de estos eslabones está conectado y forma una unión tan fuerte entre tu barco y el ancla que la cadena transmite la fuerza sin perderla en el camino. Además, este diseño especial ayuda a la cadena a mantener las cosas firmemente y también evita el óxido con el tiempo. Esto es importante porque es el óxido lo que puede debilitar tu cadena de bicicleta y hacerla peligrosa de usar.
Tamaño de la cadena: El tamaño de la cadena también importa. Debe funcionar bien con el ancla y el barco. Una cadena demasiado pequeña no se sujetará, mientras que una cadena demasiado grande será muy pesada y difícil de manejar. Asegúrate de verificar que el tamaño coincida con lo que el fabricante indica como mejor opción para tu barco en particular.
En este artículo, discutiremos sobre la prueba de carga de las cadenas de anclaje de enlace de pasador, un proceso muy crucial para garantizar su seguridad y resistencia. Obtener alguna medida de cuánto peso puede soportar la cadena antes de romperse o doblarse. Es como ver cuánto peso puede llevar un columpio antes de que se rompa.
Para probar la cadena, la marcamos con un peso determinado para conocer su fuerza. Esta prueba es crítica ya que asegura que la cadena pueda resistir las fuerzas extremas de la naturaleza, como olas masivas y mareas, sin fallar. Sin embargo, si lo hace, entonces la cadena está apta para ser utilizada.
También deben ser lo suficientemente grandes, en tamaño, para ser lo suficientemente fuertes en la cadena de anclaje. Si los eslabones son pequeños, entonces esto afecta cómo funciona la cadena y si son demasiado grandes, su integridad se ve comprometida. Además, cada eslabón debe tener la longitud adecuada, para que la cadena no sea ni muy floja ni muy ajustada. Si es demasiado floja, la cadena podría no sujetar correctamente el ancla. Si es demasiado apretada, puede causar daños a la cadena o al ancla.
Las cadenas de anclaje con eslabones transversales son particularmente susceptibles a la corrosión. Esto puede debilitar la cadena y hacerla menos segura. La corrosión ocurre cuando el metal oxida con agua y aire con el tiempo, resultando finalmente en óxido. Es crucial fabricar estas cadenas con materiales que ayuden a prevenir el óxido.
Utilizan un acero de mayor resistencia y mejor calidad para fabricar cadenas de anclaje, lo que las hace resistentes a la oxidación. Este tipo de acero también funciona mucho mejor en entornos adversos que el acero común. Y cubrirlos con una capa especial que protege las cadenas de la humedad y otros elementos que causan óxido es otra manera de salvarlas de la oxidación.